Bajan las desinfecciones por COVIF-19, según la última encuesta realizada a los socios

La demanda de desinfecciones ha bajado desde que se terminó el estado de alarma en relación al aumento que se dio en los primeros tres meses de la pandemia. El intrusismo profesional y la oferta de servicios no especializados y soluciones poco efectivas preocupan al sector.

A raíz de la crisis sanitaria provocada por la Covid-19 las empresas de desinfección aumentaron significativamente su actividad. Pero «una vez acabado el estado de alarma, en algunos ámbitos las medidas de desinfección se han relajado y ya no se hacen tantas desinfecciones como en los tres primeros meses de la pandemia», explica Quim Sendra, presidente de ADEPAP. Esto se desprende de la encuesta que asociación ha realizado entre el 16 y el 30 de septiembre entre sus miembros.

Más del 50% de los asociados han respondido a la encuesta, que es la segunda que se hace en referencia a la actividad de desinfección desde que se extendió la pandemia en nuestro país. Si en la primera ola (realizada en marzo) la preocupación de los profesionales era la escasez de equipos de protección individual (EPI) y el acceso a producto desinfectante, hoy por hoy el gran problema es el intrusismo profesional. «Empresas no especializadas y que no están registradas en el ROESB ofrecen servicios de desinfección que no están validados y no han demostrado su eficacia en la eliminación del coronavirus», explica Sendra. «Esto implica no sólo una mala praxis sino también una sensación de falsa seguridad para aquellos que contratan el servicio», insiste.

Podéis ver el informe resultante de la encuesta aquí: Informe resultats 2a onada qüestionari activitat desinfecció Covid19